La boda de María y Chema en Comillas: una celebración llena de flores, magia y emoción
El pasado 10 de octubre tuvimos el privilegio en Ferini de ser parte de una boda muy especial: la de María y Chema, celebrada en el espectacular enclave de Casería de la Mar, el nuevo espacio del Grupo Mentidero en Cantabria. Una fecha, un lugar y una pareja que recordaremos siempre con mucho cariño.
No era una boda cualquiera. María, alma creativa detrás de Martina por el Norte —una de las wedding planners más reconocidas y queridas de España—, confió en nosotros para dar vida a su propio sueño. Como floristas, recibir esa confianza de alguien que vive y respira bodas es un auténtico honor… y también un reto apasionante.
Un escenario natural con alma marinera
Comillas nos regaló su luz suave, su brisa del Cantábrico y ese encanto que mezcla lo señorial con lo salvaje. En Casería de la Mar, una finca con vistas al mar y rodeada de naturaleza, encontramos el lienzo perfecto para una decoración floral que celebrara el otoño con personalidad y frescura.
Quisimos reflejar la riqueza del paisaje cántabro con una mezcla de flores de temporada, ramas silvestres y follajes naturales, que aportaron textura y movimiento a cada rincón.
Las flores como hilo conductor del evento
Desde la ceremonia hasta la cena, las flores fueron las auténticas protagonistas.
Creamos una instalación floral envolvente para el altar, con estructuras orgánicas que parecían crecer del suelo, integradas en el entorno. Las mesas alargadas se vistieron con musgo, velas y arreglos otoñales, combinando elegancia y naturalidad, en perfecta sintonía con el espíritu de la boda.
Cada composición fue pensada para acompañar la historia de María y Chema: romántica, sofisticada y con ese punto artesanal que caracteriza nuestro trabajo.
Un trabajo hecho con cariño y admiración
Ser parte de esta boda fue mucho más que decorar un espacio. Fue compartir la ilusión de una profesional a la que admiramos profundamente, rodeados de un equipo maravilloso y en un entorno inmejorable.
El resultado fue una celebración luminosa, alegre y muy emocional, en la que las flores no solo decoraron, sino que contaron una historia de amor y belleza.
Gracias, María y Chema, por confiar en Ferini para un día tan importante.
Y gracias también a todo el equipo del Grupo Mentidero y de Martina por el Norte por hacerlo posible.
Cantabria, sus paisajes y su luz quedarán siempre en nuestra memoria… junto al perfume de aquella boda inolvidable.